Esta tecnología brinda a los jóvenes estudiantes, numerosas oportunidades para mejorar su aprendizaje y prepararlos para un mundo cada vez más digital. Sin embargo, la IA presenta desafíos que deben tenerse en cuenta al igual que el avance tecnológico.
La capacidad para personalizar el aprendizaje es uno de los principales beneficios de la IA en la educación. Esta herramienta digital puede identificar las fortalezas y debilidades de cada estudiante utilizando algoritmos que analizan su progreso, lo que puede ayudar a que los jóvenes reciban una educación adaptada a sus necesidades individuales.
La IA también permite el acceso a recursos educativos de alta calidad, como tutorías virtuales y aplicaciones de aprendizaje adaptativo, lo que permite a los estudiantes la oportunidad de aprender a su propio ritmo y de manera flexible. Sin embargo, a pesar de sus ventajas, la IA también puede generar una dependencia excesiva de la tecnología. explicó la presidenta de la Fundación Manos Unidas por Rosarito A.C. Lorena Meléndez Yáñez.
“Los jóvenes, al contar con herramientas que resuelven problemas complejos por ellos, corren el riesgo de perder habilidades importantes, como el pensamiento crítico o la resolución de problemas. Es esencial que los padres de familia o tutores, así como instituciones educativas, guíen a los estudiantes para que aprendan a equilibrar el uso de la IA”, precisó Meléndez Yáñez.
La presidenta de la fundación explicó que, aunque la IA puede personalizar de manera efectiva, no puede reemplazar la empatía, la motivación o el apoyo emocional que brindan los educadores. La educación no se trata solo de adquirir conocimientos, sino también de establecer relaciones humanas que fomenten el desarrollo emocional y social de los jóvenes. El mal uso de esta herramienta virtual puede tener un impacto en estos lazos humanos.
Otro factor que plantea preocupaciones significativas sobre la privacidad y seguridad de la información personal de los estudiantes es la seguridad de la información privada. Si no se manejan adecuadamente las plataformas educativas basadas en IA pueden recopilar datos sobre el rendimiento educativo, los hábitos de estudio e incluso información personal.
Es de vital importancia que las escuelas opten por políticas estrictas sobre seguridad y privacidad Dado que los estudiantes pueden depender de estas herramientas para resolver problemas complejos sin comprender los conceptos, uno de los principales riesgos del mal uso de la IA, es la dependencia excesiva y la pérdida de habilidades críticas.
Otro factor de riesgo es el plagio de trabajos escolares. Los estudiantes ponen en peligro su reputación y su desarrollo educativo.
Lorena Meléndez agradeció la destacada labor del personal de la Guardia Nacional, en el acercamiento con los estudiantes durante el Seminario de Prevención otorgado al turno vespertino del CECyTE Playas de Rosarito.
La presidenta de la Fundación agrego que la confianza de los estudiantes que han ganado los agentes, ha permitido la intervención en diversos casos donde se da la comisión de delitos con resultados exitosos.
Recordó a la comunidad la línea directa con la Guardia Nacional 088.
El uso de la inteligencia artificial para educar a las personas presenta tanto oportunidades como dificultades. La IA puede cambiar la manera en que los estudiantes aprenden al brindarles personalización, acceso a recursos, y preparación para el futuro. No obstante, también es importante estar atentos a sus posibles efectos negativos, como la dependencia tecnológica, la pérdida de interacción humana, y los riesgos en la privacidad de los datos.
